El uso de las sujeciones físicas en personas mayores es una práctica más extendida de lo que a menudo podemos imaginar. En centros, residencias, hospitales, etc., pueden usarlas frecuentemente en personas mayores con diversos tipos de demencia. Se usan cuando la persona puede estar alterada, si tiene delirios, etc. Sin embargo, es necesario revisar su uso, y plantearse si es necesario, cómo usarlo y de qué forma, para mantener en todo momento la dignidad de la persona mayor.