Los cálculos renales en personas mayores

cálculos renales en personas de la tercera edad

Los cálculos renales en las personas mayores, aunque no suelan producir daños definitivos, sí pueden llegar a ser bastante molestos o incluso muy dolorosos.

Veamos más en profundidad qué son, por qué se producen y cómo podemos prevenirlos.

Qué son los cálculos renales

Los cálculos renales también pueden llamarse nefrolitiasis o urolitiasis. Pueden producirse en cualquier parte de las vías urinarias, desde la vejiga hasta los riñones.

Se producen ante la acumulación de la orina, que se concentra formando pequeñas cristalizaciones, ocasionando que los minerales se fusionen. Así, se forman depósitos duros formados de minerales y sales.

Dependiendo de la gravedad de los cálculos puede expulsarse de forma natural a través de la orina o será necesaria una cirugía. En los primeros casos, puede llegar a ser solo “arenilla”, no siendo demasiado difícil expulsarlo, aunque es conveniente beber mucha agua y quizá la persona mayor necesite tomar analgésicos para el dolor.

En el segundo caso, habitualmente los cálculos están alojados en las vías urinarias, generalmente debido a una infección, y puede causar más complicaciones.

Síntomas de los cálculos renales en personas mayores

Quizá el síntoma más conocido de los cálculos es el dolor que pueden llegar a producir. Sin embargo, no sólo no es el único síntoma. También es especialmente importante entender cómo se puede producir el dolor, dónde, etc.

Habitualmente, muchas personas mayores con cálculos renales refieren síntomas de dolor intenso en la espalda, en los costados y debajo de la rodilla. Éste se puede extender hacia la parte de abajo del abdomen y la ingle. Puede variar en intensidad y venir en oleadas, así como podrá variar en intensidad e incluso en localización.

El dolor más habitual, en cambio se produce al orinar, acompañado habitualmente de síntomas de escozor. Después de orinar, se observará, además, frecuentemente, que la orina es oscura y algo turbia (entre rojizo y marrón). La necesidad de orinar, además se vuelve más frecuente, si bien es común que a pesar de ello la cantidad de orina que se expulse sea poca.

Cuando los cálculos en realidad se tratan de arenilla a menudo no producen dolor. A pesar de ello, si se produce posteriormente un cólico éste se caracteriza por ser excesivamente doloroso.

Además de dolor es frecuente también que las personas puedan tener algunos síntomas de fiebre y escalofríos, generalmente producidos por una infección en las vías urinarias.

Muchas personas mayores también sienten náuseas y vómitos en ocasiones.

Estos síntomas pueden variar en gravedad, y siempre será necesario contactar con el médico de cabecera, para que evalúe el procedimiento y el tratamiento que más oportuno resulte.

Cuando estos síntomas vayan en aumento, sin embargo, acudir al profesional es especialmente importante.

Consulta a tu médico de cabecera de inmediato ante estos síntomas

Cuando esto pasa a menudo se produce un dolor relativamente incapacitante. Puede impedir, por ejemplo, que la persona mayor se pueda tumbar o sentar en una posición cómoda.

También aumentarán las náuseas y los vómitos, así como la fiebre y los síntomas asociados a la misma, como los escalofríos y la sensación de escozor en la piel.

La dificultad para orinar también aumentará, pudiéndose llegar a observar la presencia de sangre en la orina.

Cómo prevenir la presencia de los cálculos renales en las personas mayores

Será importante cuidarse mucho para evitar dolores y complicaciones mayores. Además, en la medida en la que evitemos que se produzca “arenilla”, evitaremos también que el cálculo se llegue si quiera a producir.

Entre las medidas más importantes, encontraremos las siguientes:

  • Hidratación: es importante beber la suficiente cantidad de agua para prevenir la arena o los cálculos en el riñón. Además, cuando estos se producen, el agua puede ayudar a expulsarlos.
  • Evitar alimentos ricos en oxalatos o sodio, como espinacas, frutos secos, chocolate, sal, carnes y otros alimentos procesados, etc.
  • Controlar el peso. Aunque suene repetitivo, cuidar tu peso y tu salud es de vital importancia para prevenir y evitar la mayor parte de enfermedades. Para ello, será importante tanto hacer un nivel de ejercicio adecuado como comer una dieta sana y equilibrada.
  • Prevenir otras enfermedades como la diabetes y la hipertensión arterial. También el tener de forma recurrente infecciones en las vías urinarias en muchas ocasiones puede aumentar el riesgo de tener cálculos en los riñones.

No obstante, los cálculos renales tienen a menudo un factor hereditario, con lo que será importante tener especial cuidado si tienes antecedentes familiares con esta enfermedad, y poner un especial cuidado en mantener tu salud.

Contáctanos

This contact form is deactivated because you refused to accept Google reCaptcha service which is necessary to validate any messages sent by the form.
© FundaciónFASS 2024 - Todos los derechos reservados