Mitos sobre la demencia hay muchos, y no siempre somos conscientes de ellos. En primer lugar, se trata de saber que existen ideas preconcebidas de esta enfermedad. Pero no basta con eso. También es necesario aprender a identificar estas ideas, tanto en otras personas como en nosotros mismos.
Una enfermedad tan conocida y tan común como lo es la demencia permite que todo el mundo hable de ella. Al hacerlo, es inevitable que haya muchas generalidades y muchos conceptos confusos que nos puedan llevar a error.
Veamos las concepciones erróneas más comunes:
Índice
- 1 Mitos sobre la demencia
- 1.1 Alzheimer y demencia son lo mismo
- 1.2 Si tengo antecedentes genéticos, no hay nada que hacer
- 1.3
- 1.4 Solo se desarrolla la enfermedad si se es muy mayor
- 1.5 Los síntomas son los normales en cualquier persona a medida que envejece
- 1.6 Como no tiene cura, no hay nada que hacer
- 1.7 Demencia es igual a olvido
- 1.8 Recuerda el pasado con detalle, por lo que no tiene demencia
- 1.9 Contáctanos
Mitos sobre la demencia
Como hemos mencionado, hay muchas ideas preconcebidas más comunes sobre la demencia en personas mayores. Vamos a ver cuáles son las más frecuentes. De esa manera, será más fácil identificarlas y entender mejor, tanto la enfermedad como a la persona que la padece.
Alzheimer y demencia son lo mismo
Frecuentemente se confunden Alzheimer y demencia como si fueran palabras sinónimas. Sin embargo, no lo son. Como se suele decir: “Son todos los que están, pero no están todos los que son”. O, dicho de otra forma: el Alzheimer es una demencia, pero no todas las demencias son Alzheimer.
Comencemos entendiendo qué es la demencia. La demencia es un conjunto de síntomas que afectan a diversas áreas, como la memoria, el lenguaje, las habilidades sociales, etc., y que afectan significativamente a las actividades de la vida diaria.
Sin embargo, no todo el mundo tiene los mismos síntomas, o padece demencia de la misma manera. En función de qué síntomas en concreto tenga la persona, por qué se origine, cómo se produzca, etc., podemos englobar las demencias en varios subtipos.
De esa forma, además de Alzheimer, podemos encontrar demencia de cuerpos de Lewy, demencia vascular, etc.
Si tengo antecedentes genéticos, no hay nada que hacer
Para empezar, diferenciemos que una enfermedad tenga un componente genético y que sea hereditaria. Aunque suene igual, no tiene las mismas implicaciones.
Una enfermedad es hereditaria cuando la sufrimos si nuestros padres la sufren. Sin embargo, hay muchas enfermedades que, aunque tengan un componente genético, éste no es un factor definitivo.
Es decir, sí, el hecho de que nuestros padres tengan demencia puede significar que tenemos más posibilidades de sufrirla, pero no está todo perdido. En primer lugar, no necesariamente la vas a acabar padeciendo. Además, siempre puedes hacer ejercicios, entrenamientos y fortalecimiento cognitivo. Aunque no se pueda prevenir la demencia realmente, sí puedes disminuir las posibilidades de acabarla sufriendo.
Solo se desarrolla la enfermedad si se es muy mayor
Si bien lo más común es desarrollar demencia cuando se es más mayor, la enfermedad también puede aparecer en adultos más jóvenes.
Cuando eso ocurre, decimos que la persona padece demencia de inicio temprano. Esto puede ocurrir teniendo la persona incluso 30 años aproximadamente, por lo que las actividades diarias que desarrolla y las necesidades que tiene son diferentes.
Eso hace que los síntomas y características de la enfermedad en estos casos sean más específicos. Por ejemplo, habitualmente, implican la necesidad de solicitar una discapacidad, ya que la persona se encentra normalmente trabajando hasta ese momento.
Todo esto es lo que hay que estudiar junto con tu médico de cabecera y tu neurólogo, en estas situaciones. Sin embargo, es cierto que es menos común que ocurra, siendo más habitual que se dé la demencia a partir de los 65 o 70 años.
Los síntomas son los normales en cualquier persona a medida que envejece
Frecuentemente muchas personas piensan que es normal presentar síntomas como la desorientación, los problemas de memoria o de atención según se envejece. Así, confunden los síntomas de una demencia como síntomas normales, esperables e inevitables.
Al hacerlo, además, asumen que no hay nada que se pueda hacer al respecto, ya que se conforman con que simplemente “es ley de vida”.
No es así, es importante atender, entender y actuar frente a la demencia. Si notas síntomas no dudes en contactar con tu médico de cabecera y pedir una cita con el neurólogo.
Como no tiene cura, no hay nada que hacer
La demencia es una enfermedad sin cura. Eso es cierto. Sin embargo, eso no significa que no haya nada que se pueda hacer al respecto. Sí hay tratamientos que se pueden poner en práctica.
En primer lugar, hay tratamientos farmacológicos que el doctor, si considera oportuno, podrá recetarte para retrasar el avance de la enfermedad.
En segundo lugar, además, hay tratamientos no farmacológicos que se pueden llevar a cabo. Para ello, es importante entender qué síntomas ha comenzado a presentar, y en qué aspectos o áreas la persona conserva su autonomía e independencia. Según eso, será importante entrenar aquellas áreas en las que se haya comenzado a perder y trabajar en las que no para evitar hacerlo.
Demencia es igual a olvido
Las demencias pueden presentar muchos síntomas. Los olvidos y los fallos de memoria son uno de ellos, pero no el único. Ni si quiera necesariamente el más importante. Sin embargo, sí son generalmente el síntoma más conocido.
Las demencias engloban desde problemas de atención, hasta problemas de orientación personal, espacial y temporal. También pueden incluir problemas de comunicación, dificultades visuales o espaciales, etc.
Recuerda el pasado con detalle, por lo que no tiene demencia
Por supuesto, a pesar de lo mencionado, los problemas de memoria sí son uno de los síntomas de la demencia. Por ello, también, muchas personas piensan que si no se tienen problemas de memoria no se tiene demencia.
También asocian los problemas de memoria con la capacidad de recordar el pasado de manera vívida o detallada.
Cuando una persona mayor tiene demencia, sin embargo, a menudo recuerda sin problemas el pasado, sobre todo el pasado más lejano. Son los acontecimientos más recientes los que suelen causar más problemas de memoria.
Conociendo estos mitos sobre la demencia, ¿Has detectado alguno que pensaras que era cierto?