Cómo realizar los cuidados de una persona mayor con una ostomía puede resultar un mundo. Los cuidados del estoma pueden resultarnos complicados, pero la adaptación incluye un cambio de pensamiento a muchos niveles. Por ello, a manudo sufre la autoestima, y podemos acabar por descartar, al menos en nuestra cabeza, la posibilidad de una vida normal.
Sin embargo, eso no tiene por qué ser así. Para poder conservar nuestra calidad de vida con un estoma es necesario comprenderlo y saber cuál es la mejor forma de adaptarse a él.
Índice
Cómo realizar los cuidados de una persona mayor con una ostomía: prevenir síntomas y complicaciones
Como hemos ido explicando, el cuidado de la ostomía, independientemente de dónde se sitúe ésta, habrá de ser muy minucioso y realizarse con mucha atención. De lo contrario, pueden producirse complicaciones, ya sea en el momento de la construcción del estoma o en adelante.
Conocer cuáles pueden ser estos posibles problemas nos ayudará a poderlos prevenir y de esa forma, tras identificarlos, poderlos tratar.
- Problemas en la piel, como dolor, picor, escozor, úlceras, hernias, etc.
- Estenosis, producida cuando el orificio del estoma se cierra o disminuye en diámetro.
- Granulomas, producidos cuando se forma una ocultación alrededor del estoma. Puede producir picor, dolor, o incluso sangrado.
- Problemas específicos en función del tipo de estoma: en caso de colostomías, se puede producir una emisión de heces de forma prolongada, pudiendo producir vómitos o nauseas. En caso de un estoma intestinal, el intestino puede salirse parcialmente a través del propio estoma, al distenderse el mismo.
- Cambio de color del estoma, frecuentemente un oscurecimiento de éste.
- Fiebre
- Aumento de sequedad en la boca, orina más oscura y con un olor fuerte, etc. Esto puede estar indicando deshidratación.
Si notas alguno de estos síntomas, no dudes en contactar con un profesional. El médico podrá discriminar y tratar todos los síntomas importantes, siempre que le mantengas informado de los mismos.
Cómo realizar los cuidados de una persona mayor con una ostomía: qué hacer y qué no
Saber cómo actuar a nivel sanitario con la ostomía es de vital importancia, pero muchas otras dudas pueden aparecernos. Comprender cómo el estoma va a afectarnos a nuestros hábitos diarios también es importante.
Comprender cómo, si bien tendremos que adaptarnos, podemos llevar una vida normal, puede marcar la diferencia. Esto es porque a menudo se pueden producir cambios a nivel anímico o en la autoestima, e incluso acabar por limitar innecesariamente nuestras relaciones sociales.
Veamos las diferentes áreas y qué podemos o no podemos hacer al respecto de ellas cuando cuidemos a una persona con estoma:
- Alimentación: Dependiendo de la zona, la dieta puede mantenerse, tras la aprobación del doctor, con normalidad. Sin embargo, puede haber determinadas ostomías (como la gastrostomía o la colostomía) con los que sea necesario tener precaución. Determinados alimentos, al fin y al cabo, pueden producir estreñimiento, gases, diarrea, mayor olor en la orina, etc. Masticar bien, comer varias veces al día y cantidades adecuadas, y beber suficiente agua puede ayudar. También puede ser buena idea probar previamente la comida, con precaución, para ver cómo afecta, antes de comerla en público, pues cada cuerpo puede reaccionar de forma distinta. Ante cualquier duda, consulta con tu médico.
- Actividad física: determinadas actividades, como levantar pesas o correr, pueden requerir de adaptaciones para realizarlas. Se pueden usar fajas y otra serie de ayudas para fijar la bolsa, y siempre será importante preguntar previamente al médico, y esperar un tiempo prudencial tras la operación a que se haya sanado. No obstante, la mayoría de las actividades que una persona mayor realiza se pueden mantener sin problemas, y no causarán ninguna complicación.
- Actividades diarias: la mejor idea suele ser que, tras la aprobación de tu doctor, mantengas tus hábitos diarios normales. Tan solo algunas actividades físicas de contacto o que impliquen esfuerzo físico requieren precaución y tiempo.
- Relaciones sociales: quizá puedan ser las más complicadas, ya que las dificultades no se producen por problemas físicos o de salud, si no a nivel emocional, cognitivo y por autoestima. Es importante darse cuenta que puedes decírselo tan solo a quien tú quieras, y como quieras. Puedes usar la ropa con la que más cómodo te vayas a sentir, o ropa que evite que se note o te incomode con el estoma. Aparte de aquellas personas que se encarguen de ayudarte con el cuidado (como el doctor, quizá familiares y/o cuidadores formales e informales), nadie más tiene por qué saberlo.
- Cuida tu salud mental: una buena idea es ir a grupos de apoyo o hablar con otras personas que tengan ostomías. Busca ayuda psicológica si crees que puede ayudarte a llevar mejor tu día a día, o pide ayuda a familiares o amigos que te puedan entender o apoyar.