Cómo detectar maltrato en personas mayores
Por desgracia, el maltrato a las personas mayores no es un tema nuevo ni reciente. Son muchos los factores que hacen de las personas mayores una población vulnerable ante el maltrato: edad, género, estado físico y mental, situación familiar, económica, etc.
Incluso a día de hoy, el maltrato a las personas mayores es algo que permanece invisible, dándose en la mayor parte de las ocasiones en el propio domicilio, ya sea en el entorno familiar o por parte de la persona cuidadora.
Índice
Tipos de maltrato y cómo identificarlo
El maltrato a las personas mayores puede darse en varios ámbitos: abuso patrimonial, abuso sexual, negligencia del cuidado, abandono, maltrato físico, maltrato psicológico, estructural, etc. Esta es una de las clasificaciones más representativas en la que englobar los diferentes términos y tipos de maltrato.
Maltrato físico a mayores
Causa daños o lesiones por medio de acciones. Incluye golpes, quemaduras, encerrar a las personas mayores o el uso inapropiado de medicación. Si notamos que las personas mayores sienten dolor al ser tocadas, vemos marcas o moretones o sospechamos de un uso inapropiado de los medicamentos (adormilamiento excesivo, por ejemplo) debemos estar en alerta ante un posible maltrato físico.
Maltrato sexual a mayores
Este recoge cualquier contacto de carácter sexual en contra de la voluntad de la persona mayor. Debemos sospechar que está siendo abusado si notamos moretones alrededor del pecho o del área genital, vemos hemorragias, ropa interior rota, etc.
Negligencia
Falta del cumplimiento de las necesidades físicas, psicológicas, económicas, etc., de las personas mayores. Signos de alarma son úlceras por presión, suciedad u olor a orina, deshidratación o desnutrición, ignorar o aislar a la persona mayor, ir vestido de forma inadecuada, etc.
Maltrato psicológico a personas mayores
Agresiones verbales, amenazas, humillaciones, tratar a las personas mayores con infantilismo, como si fueran niños, etc. Esto genera en las personas mayores impotencia, indefensión o miedo inexplicable. No se atreven a hablar abiertamente y se comportan de forma inusual.
Maltrato económico a ancianos
Aquí se agrupan los robos o engaños con el objetivo de quedarse con el dinero o los bienes de las personas mayores. En estos casos, se pueden notar patrones irregulares en los gastos, cambios repentinos en las cuentas bancarias o el testamento, firmas en los cheques que no se parecen a la firma de la persona, etc.
También debemos estar alerta si vemos otros factores como una gran dependencia hacia el cuidador, una importante implicación emocional hacia él o ella, la excesiva necesidad de estar en el domicilio, una actitud sumisa poco habitual, etc.
Cómo prevenir el maltrato en mayores
Entre las acciones que se deben hacer tanto para prevenir el maltrato hacia las personas mayores como para corregirlo si se detecta, está lo siguiente:
- Evitar el aislamiento social
- Organizar la atención clínica del paciente (que acuda regularmente al médico, se haga las revisiones oportunas, etc.) y simplificar y organizar la medicación.
- Adecuar la vivienda de las personas mayores a sus necesidades.
- Evitar la sobrecarga de los cuidadores principales, ya sean profesionales o no profesionales.
- Favorecer y facilitar el apoyo social, institucional y familiar de las personas mayores.
- Buscar apoyo psicoterapéutico, ya sea para las propias personas mayores como para su entorno.
- Que las personas mayores cuenten con un cuaderno donde puedan escribir sus vivencias, sentimientos, preocupaciones, etc.
- Evitar el lenguaje estigmatizante: enfermo, pasivo. También debemos evitar calificar a la persona. Es más eficaz y menos dañino hablar de su conducta. Por ejemplo, si se dice “eres un despistado” en lugar de “tienes algún despiste” se empeorará considerablemente su autoconcepto y autoestima.
- Tratar de tener una adecuada formación específica, centrando los cuidados en la persona, en su historia de vida, poniendo atención en aspectos como alimentación, vestido o, higiene u otros aspectos personales. Debemos también promover la autonomía y participación en la toma de decisiones del día a día.
- Evitando los falsos mitos y prejuicios, viendo a las personas mayores según sus carencia y déficits en lugar de aquello que aun conservan y que pueden aportar en la sociedad.
Es importante quitar de la cabeza la idea de que solo las personas horribles o malas pueden maltratar a los mayores: el desconocimiento, la sobrecarga, el estrés, etc., son factores de riesgo, y son nuestros mayores quienes sufren las consecuencias de ello si no prestamos la suficiente atención.