El impacto de las actividades artísticas y creativas para las personas mayores puede ser muy alto. Ya hemos hablado en ocasiones anteriores acerca de la importancia de la estimulación y de la realización de actividades en el desarrollo cognitivo de las personas mayores. Hemos comentado su impacto en la calidad de vida y en el envejecimiento activo.
Sin embargo, no sólo importa la realización de actividades. Qué tipo de actividades realices también puede tener efectos diferentes en la persona.
Veamos cuáles son los principales beneficios que pueden tener estas actividades:
Índice
El impacto de las actividades artísticas y creativas para las personas mayores: beneficios
Las actividades artísticas y creativas pueden tener un impacto positivo en diversas áreas en realidad. Al contrario de lo que popularmente se piensa, no solo tiene por qué producir una mejoría a nivel cognitivo. Pueden proporcionar alivio a nivel anómico y personal, mejoran la calidad de vida, afectar al desarrollo social, etc. Veamos las principales ventajas:
- Ventajas a nivel cognitivo: si bien no son las únicas ventajas, no podemos ignorarlas. Participar en actividades artísticas y creativas estimula el pensamiento crítico, la memoria, la atención y la concentración. Estimula la creatividad y la capacidad de resolver problemas, lo que contribuye a mantener un cerebro activo y saludable.
- Ventajas a nivel anímico: Las actividades artísticas y creativas pueden ayudar a reducir el estrés, la ansiedad y la depresión. Fomentan la expresión de emociones y pensamientos, promoviendo un mayor autoconocimiento y una sensación de satisfacción y logro personal. Esto a su vez puede ayudar a desarrollar y mejorar otras áreas como el autoconcepto y la autoestima.
- Ventajas a nivel social: estas actividades tienen tanto beneficios directos como indirectos. Al fin y al cabo, ayudan a crear oportunidades de conexión interpersonal y potencian la pertenencia a un grupo o a la comunidad.
- Ventajas a nivel motor: las actividades de este tipo conllevan el uso de destrezas y habilidades físicas distintas, como las habilidades manuales, la coordinación mano-ojo, etc. Actividades como la pintura, la escritura o el dibujo mejoran la motricidad fina, lo que a su vez puede ayudar a mejorar la destreza en otras actividades de la vida diaria.
Sin embargo, no todo resulta siempre tan sencillo. Que algo pueda resultar beneficioso para una persona, nos siempre significa que vaya a resultar fácil implantar la actividad. Al fin y al cabo, estamos hablando de personas adultas y autónomas que toman sus propias decisiones. Pueden, sencillamente, no querer hacerlo. Veamos los principales retos a los que nos podemos enfrentar.
El impacto de las actividades artísticas y creativas para las personas mayores: retos
Como hemos comentado, uno de los problemas puede ser la propia negativa de la persona a realizar cualquier clase de actividad creativa. Esto se puede ver especialmente acrecentado en caso de que la persona mayor tenga alguna clase de deterioro cognitivo. Esto también puede afectar a otros niveles, como por ejemplo dificultando la capacidad de la persona para seguir instrucciones o para mantener la concentración.
Por ello, uno de los factores más importantes será siempre el de adaptar la actividad a la persona. Tanto en nivel de dificultad como en gusto, interés, momento, frecuencia, etc. también será de utilidad dar instrucciones claras y sencillas que la persona pueda entender.
A pesar de ello, las limitaciones no son tan solo cognitivas. Puede haber otra clase de limitaciones físicas que dificulten la realización de alguna actividad, como movilidad reducida, etc. Cualquier clase de ayuda técnica o humana que pueda serle de utilidad facilitará que la persona se vea capacitada a hacerlo y por lo tanto pueda disfrutar de ello.
Al fin y al cabo, el autoconcepto puede ser un factor de suma importancia. Si no consideramos que podemos hacerlo, o si vemos que no lo hacemos tan bien como “deberíamos”, acabaremos por abandonar la actividad. La clave es encontrar algo que la propia persona disfrute y desee hacer.
Tipos de actividades artísticas y creativas
Hemos visto y tenemos claro por qué puede ser útil, y cuáles son los retos y dificultades a los que nos podemos llegar a enfrentar. Sin embargo, la tarea quizá más complicada es pensar qué clase de cosas podemos hacer. A continuación, os propondremos una serie de ideas que pueden ayudaros:
- Pintura y dibujo: se puede realizad de muchas maneras según la necesidad y gusto: desde pintar con lápices o ceras, usar pinceles, etc. Se puede adaptar la actividad usando pinceles gruesos, usando plantillas en lugar de dibujo libre o indicando qué puede dibujar con mayor o menor número de instrucciones.
- Actividades con música: desde cantar hasta bailar, pasando por tocar instrumentos, la imaginación es el límite. Usar además canciones de la infancia puede estimular mucho a nivel anímico y cognitivo.
- Narración de historias y reminiscencia: se pueden usar fotografías u otros objetos simbólicos o significativos para la persona para contar o recordar anécdotas del pasado. También se puede combinar con escritura, ya sea de textos o de poemas. Puede también inventarse historias o pequeños cuentos, o incluso continuar otro que esté inacabado.
- Manualidades: tejer, hacer collages, hacer punto, etc. seguramente haya muchas actividades similares que la persona haya realizado anteriormente. ¡Quizá pueda recuperar alguna!
- Teatro: quizá poco ortodoxo, pero muy divertido. Se puede hacer desde en compañía de una persona únicamente, hasta en pequeños grupos, o incluso en la comunidad o en grupos ya preparados en la zona. Juntarse para hacer pequeñas representaciones, obras o juegos despertará el interés y las capacidades de la persona, y puede marcar una diferencia en la rutina del día a día.
Recuerda que cada persona es única, por lo que es importante adaptar las actividades creativas a sus necesidades individuales. Además, el objetivo principal debe ser disfrutar del proceso creativo y el bienestar emocional que esto puede proporcionar.