Las intolerancias alimentarias en personas mayores son un tema al que a menudo no se presta atención. Y es que según envejecemos, son muchos los cambios que puede ir experimentando nuestro organismo. entre esos cambios, también podemos experimentar cambios en la digestión. Nuestra forma y facilidad a la hora de dirigir y metabolizar diferentes alimentos puede verse afectada.
En este artículo trataremos de comprender mejor qué es una intolerancia alimentaria, cómo afecta a las personas mayores y cuáles son las principales intolerancias que encontramos en la población adulta mayor.
Índice
Qué es una intolerancia alimentaria
Una intolerancia alimentaria es una reacción que tiene el organismo cuando tiene dificultades para procesar, metabolizar o digerir determinados alimentos.
Si bien es cierto que una dieta variada y equilibrada es en principio sana para todos, cada organismo es diferente. Es importante estar atento a las posibles reacciones que tengamos a la comida. De ser necesario, tendremos que hacernos un análisis para detectar intolerancias o alergias.
Es más fácil que nos percatemos de una alergia antes que de una intolerancia. Esto es debido a que los síntomas de la alergia suelen ser más intensos. Además, las alergias suelen conllevar la intervención del sistema inmunitario, no siendo así en una intolerancia.
Si bien debido a eso puede parecer que una intolerancia es menos grave, esto puede provocar que tardemos más en darnos cuenta, acudir al médico y ponerle una solución. A menudo, seguiremos ingiriendo aquellos alimentos que nos provocan intolerancias sin darnos cuenta.
Principales síntomas de las intolerancias alimentarias en personas mayores
Ya hemos entendido qué es una intolerancia. También comprendemos mejor la importancia de detectarlas y poner un remedio. Para ello, sin embargo, será importante conocer los principales síntomas.
Si frecuentemente te sientes así, no lo dejes pasar. Consúltalo con tu médico de cabecera.
- A menudo las intolerancias vienen acompañadas de problemas digestivos. Entre los síntomas más frecuentes podemos sentir dolores de estómago o podemos sufrir de cólicos. También podemos tener alguna diarrea o heces ácidas, así como flatulencias. También se pueden producir vómitos y nauseas frecuentemente.
- Las personas que tienen intolerancias no asimilan bien algunos alimentos. Debido a ello, es frecuente que varíen el peso. Concretamente es frecuente que se produzcan aumentos de peso que no responden a una causa conocida.
- Debido a no procesar correctamente los alimentos, el organismo no saca de ellos los nutrientes que necesita. Por ello, es común sentir molestias en la musculación y dolores e inflamación en las articulaciones.
- Son muchos los efectos que puede tener en una intolerancia alimentarias en las personas mayores. Entre otras cosas, se pueden producir problemas en la piel como erupciones, picores, urticaria, acné… etc.
Principales intolerancias alimentarias en personas mayores
Hay muchos tipos de intolerancias, veamos las más comunes en personas mayores, y cómo podemos actuar una vez las detectamos:
- Intolerancia a la lactosa: ésta se produce cuando el cuerpo no genera la suficiente lactasa. La lactasa es la encima que ayuda a absorber la lactosa. Al no deber la persona ingerir alimentos como leche, queso o yogurt, le es más difícil obtener el calcio suficiente. Por ello, es importante aumentar la ingesta de otros alimentos como sardinas, brócoli o espinacas, ya que son ricos en calcio. De la misma forma, será importante obtener la suficiente vitamina D, ya que ayuda a procesar el calcio.
- Intolerancia al gluten: consiste en una sensibilidad especial al gluten, que afecta a la mucosa del intestino. El gluten es una proteína que podemos encontrar en cereales como el trigo, la avena o el centeno. A pesar de que inicialmente muchas personas piensan que la intolerancia al gluten es más frecuente en niños, la cantidad de personas que sufren esta intolerancia va en aumento. La única medida que se puede llevar a cabo es evitar aquellos alimentos que tengan gluten, así como la contaminación cruzada. por suerte, cada vez hay más concienciación y opciones al respecto.
- Intolerancia a la histamina: las personas que sufren de esta intolerancia no producen suficiente cantidad de una encima llamada diamonooxidasa (DAO). Debido a ello, no se puede disolver la histamina correctamente, y ésta se tiende a acumular. Además de ser una sustancia presente en alimentos como embutidos, quesos azules, café, chocolate, etc., también es producida por el propio organismo. Por ello, además de evitar aquellos alimentos que contienen histamina, es útil una dieta rica en zinc, cobre, vitamina C y vitamina B6, ya que mejoran la función de la enzima DAO.
Con toda esa información, nos podemos hacer una mejor idea de a qué nos enfrentamos y qué hacer al respecto. Sin embargo, como siempre, será de vital importancia acudir al médico de cabecera ante cualquier duda. Él podrá orientarnos o derivarnos al profesional oportuno.
