El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) es una enfermedad que afecta a un porcentaje relativamente alto de la población. Con el aumento de la esperanza de vida, también han aumentado el número de personas mayores que sufren trastorno obsesivo compulsivo.
Cuando las personas envejecen, el tipo de obsesiones puede cambiar, y éstas se pueden agudizar.
Habitualmente, no es un trastorno en el que se piense mucho, y menos relacionado con la vejez. Por ello, podemos correr el riesgo de no entenderlo. Esto puede provocar que no sepamos tratar las obsesiones y sus compulsiones, y que no sepamos ayudarles. Comprendamos un poco más en profundidad el trastorno obsesivo compulsivo en personas mayores.
Índice
Qué es el trastorno obsesivo compulsivo y cómo afecta a personas mayores
El TOC es un trastorno caracterizado por patrones de pensamientos y miedos no deseados, que son las obsesiones. Estas, llevan a la persona a la realización de forma compulsiva de acciones y comportamientos repetitivos: las compulsiones.
En muchas ocasiones acaba siendo un “círculo vicioso”: cuanto más tratas de ignorar o luchar contra tus obsesiones, más aumenta tu nivel de ansiedad y estés. Éste te lleva a realizar la compulsión para encontrar alivio a esa ansiedad.
Las personas que sufren de trastorno obsesivo compulsivo son conscientes de que sus miedos son irracionales y exagerados. A pesar de ello, sienten que las obsesiones y las compulsiones se encuentran fuera de su control.
Un aspecto que llama la atención es que no hay una relación lógica aparente entre el miedo u obsesión y la compulsión que calma la ansiedad que se produce. A pesar de ello, hasta que no tiene lugar la compulsión, la ansiedad persiste.
El problema más grande del TOC es que afecta notablemente a la vida diaria. No deja descansar y produce malestar en la persona mayor que lo padece. No permite que realicen su día a día con normalidad. Es un gasto de tiempo y esfuerzo para ellos.
Principales diferencias entre personas jóvenes y personas mayores con TOC
La principal diferencia en personas jóvenes que sufren trastorno obsesivo compulsivo y las más mayores no está en los síntomas. En realidad, dichas diferencias hacer referencia al contenido mismo de las obsesiones.
Las obsesiones pueden tratar sobre temas muy diferentes. Hay personas que sienten por ejemplo miedo a contraer alguna enfermedad, o a que les pase algo grave. También puede haber obsesión por el orden, obsesiones religiosas o sexuales, etc.
Entre las personas mayores, los miedos más comunes hacen referencia al miedo a contraer enfermedades. De la misma manera, de las compulsiones más habituales es el lavarse las manos con frecuencia. También hay muchas compulsiones de las llamadas “compulsiones de verificación”. Entre ellas, encontramos comprobar repetidamente que la puerta está cerrada, comprobar el gas, etc.
Qué hacer ante ello
Ya comprendemos un poco mejor lo que es el trastorno obsesivo compulsivo. También nos hacemos una idea de cómo puede afectar a la población mayor. Veamos cuáles son las pautas más adecuadas. Comprendamos qué podemos hacer para facilitar la situación y ayudar a que la persona mayor con TOC recuperar su día a día.
- Recibe el tratamiento adecuado: Por desgracia, no existe la prevención para esta clase de trastorno. No puedes prevenirlo o evitarlo. Sí puedes ser consciente de los síntomas y buscar ayuda. Consulta a un psicólogo. La terapia cognitivo conductual es de las que ha demostrado más eficacia en el tratamiento del TOC.
- Permite que se exprese: La angustia y la ansiedad son una parte intrínseca del trastorno obsesivo compulsivo. Además, el ser consciente de la irracionalidad de los comportamientos puede traer vergüenza y sufrimiento. Deja que hable contigo, que se desahogue. Hazle saber que no va a ser juzgado.
- No trates de forzar a que pare. Realmente, aunque quieren, no pueden o saben parar. Que trates de insistir en que lo haga, o convencerle, puede ser contraproducente. Solo causará más frustración y ansiedad, lo que empeorará los síntomas. Si ha comenzado con la compulsión, no la interrumpas.
- Ayúdale a manejar el estrés. Cuando la persona esté mejorando, la no realización de las compulsiones puede estresarle. Esto puede llevarle a tratar de lidiar de otras maneras con la ansiedad. Por ello, es importante tratar de ayudar a evitar estrategias dañinas a la hora de manejar el estrés.
- Dale espacio. Puedes ayudarle, y estar ahí como una parte activa de su vida. No obstante, tiene que ser la propia persona la que ponga solución. Estar demasiado encima puede llegar a agobiarle más de lo que pretendes.