Uno de los miedos dentro del segmento de personas de la tercera edad son las enfermedades. Al tratarse de un grupo de riesgo están más expuestos a cierto tipo de enfermedades, que además las sufren de sobremanera. Una enfermedad común en ancianos y personas de edad avanzada es la neumonía. ¿Cómo detectar la neumonía en personas mayores? ¿Qué síntomas tiene? ¿cómo prevenirla?
La neumonía dentro de este sector de la población puede ser en muchos casos letal, por eso conviene conocer esta enfermedad y su repercusión. Es necesario estar atento a los síntomas y ante cualquier duda acudir a un especialista para que determine la gravedad de la enfermedad. Así como si realmente se trata de un episodio de neumonía o la afección corresponde a otro tipo de patología.
Qué es la neumonía
La neumonía, como patología, es una enfermedad que afecta al aparato respiratorio, más concretamente a los pulmones. El alcance y la profundidad de la neumonía en una persona mayor dependerá de si se ha tratado a tiempo, así como si existen factores de riesgo que puedan agravar la enfermedad.
Es una enfermedad que afecta, sobre todo, a los ancianos. Unos pacientes mucho más vulnerables a patologías pulmonares y respiratorias.
¿Es contagiosa la neumonía? Hay que dejar claro que no se trata de una enfermedad contagiosa. No obstante, las variantes virales sí que pueden transmitirse, aunque no suele ser lo más habitual.
Síntomas de la neumonía en ancianos
¿Cómo saber si un anciano puede estar sufriendo una neumonía? Esta enfermedad ofrece unos síntomas habituales y concretos. Pero hay que tener en cuenta que no todos los síntomas se van a ver reflejados en una persona que esté en un proceso de neumonía. Aunque sí hay una tendencia de afecciones populares y comunes asociados a esta patología.
En un primer episodio, algunos de los síntomas principales que se suelen reproducir coinciden con el siguiente listado:
- Tos incipiente. Una tos que puede incluir mucosidad o sangre en algunos casos.
- Fatiga, cansancio muscular y debilidad
- Mareos
- Fiebre
- Dificultad para respirar y dolor en el pecho
Si la enfermedad avanza, pueden derivar en síntomas más graves, aparte de los mencionados anteriormente,
- Insuficiencia respiratoria fuerte
- Dolores de cabeza y fiebre alta
- Desorientación y malestar general
- Acumulación de líquidos en los pulmones
- Taquicardias
Causas de la neumonía en personas mayores
Esta enfermedad aparece como consecuencia de una infección en los pulmones. Una bacteria o virus que se introduce vía respiratoria y que deriva en los síntomas antes mencionados. Si bien es cierto que existen factores previos que inciden en la propagación de esta enfermedad, por una disminución en las defensas del cuerpo están relacionadas con patologías como las siguientes.
- Enfermedades crónicas
- Consumo de tabaco
- Mala alimentación
- Falta de higiene
- Nivel inmunitario bajo
Cómo prevenir la neumonía en personas de la tercera edad
Se recomienda tomar ciertas medidas, más aún en las personas mayores, para evitar llegar a estas condiciones. Hay metodologías y hábitos que ayudan a prevenir contraer enfermedades como la neumonía y que siempre se aconseja realizarlo en la medida que se pueda. Esta serie de medidas son de gran ayuda, no solo para la neumonía, sino para evitar contraer otras enfermedades. Es necesario contar con la ayuda de cuidadores de mayores o familiares que puedan dar un soporte a estas personas.
Una de las recomendaciones principales para evitar que personas mayores contraigan neumonía es vacunarse. La gripe es un epicentro de aparición de episodios de neumonía, por lo que la vacunación de la gripe es un paso determinante para evitar esta patología. Al igual que la vacunación especial sobre una serie de bacterias particulares causantes de la aparición de la neumonía.
Otro de los apartados importantes es conservar una buena salud pulmonar. Esto se refiere a acabar con hábitos como fumar, consumir alcohol, o no cuidar la higiene bucal. Estas malas rutinas son un germen de aparición de neumonía a cualquier edad.